Pastor Correa Prats estudió arquitectura en la Universidad de Chile, su proyecto de título junto a los arquitectos Jorge Martínez Camps y Juan Honold Dünner, llamado «Ensayo de Planificación del Gran Santiago» (1952), se convertiría en el expediente de diagnóstico para la elaboración del primer Plan Intercomunal de Santiago (1960) por la Dirección de Planeamiento del Ministerio de Obras Públicas.
Se desempeñó en la Dirección de Planeamiento y Urbanismo del Ministerio de Obras Públicas (1953-1968) y fue consultor en urbanismo, participando en 38 Planes Reguladores, 2 Planes Intercomunales y diversos Estudios Regionales y Preinversionales.
Publicó los libros «Evocación de un Estudio de Planificación» y «La Palma Chilena. Monumento Vegetal».
Fue Consejero —cargo equivalente a Director Nacional— del Directorio Nacional del Colegio de Arquitectos de Chile para los periodos 1966-1967, 1968-1969, 1970-1971, 1972-1973 y 1974-1982.
El Colegio de Arquitectos de Chile le entregó los premios Alberto Risopatrón (1998) y Sergio Larraín García-Moreno (2004).
En 2010 fue reconocido junto a Juan Honold Dünner con el Premio Nacional de Urbanismo.
El académico del Departamento de Urbanismo, Prof. Alberto Gurovich le rindió un homenaje a Pastor Correa a través de este texto:
"El Profesor Pastor Correa Prats, quien ha fallecido recientemente, fue postulado por nuestro Departamento para recibir, en conjunto con el Profesor Moisés Bedrack M., el Premio Nacional de Urbanismo, de manera muy justificada por su extensa, creativa y rigurosa obra profesional en diversos aspectos de nuestro campo disciplinar.
Fue integrante de una generación formada alrededor del perfeccionamiento analítico y proyectual de los estudios urbanísticos, abordando el desarrollo y situación de los procesos de estructuración metropolitana del Gran Santiago y una muy extensa lista de entidades urbanas y regionales de nuestro país expresados en proyectos, manuales de intervención y creativos diseños.
Paralelamente estuvo siempre disponible para resolver con llaneza las consultas, orientar y enseñar desde una posición de respeto de los casos y fuentes.
En síntesis, es necesario resaltar sus aportes originales en planeamiento regional y urbano, sus manuales de equipamiento comunitario y el complejo campo de regularización y desarrollo del espacio público y la vialidad intraurbana, empleando siempre lenguajes accesibles y creativos.
Adicionalmente, cultivó un estilo de trabajo reservado, respetuoso de las fuentes y un gran cariño por su profesión, dispuesto a colaborar con experiencias y antecedentes de alta consistencia que habrían merecido un mayor agradecimiento en nuestra disciplina."