La publicación del Ranking QS Mundial de Universidades tiene por objetivo proporcionar información comparativa a los postulantes a las escuelas de educación superior en 51 disciplinas, sobre la base de la calidad de las mismas, clasificadas según un conjunto de indicadores que comprenden esencialmente a la reputación institucional y la productividad de la investigación científica. Estos criterios difieren de otros tantos aplicados por una gama amplia de clasificaciones universitarias y consecuentemente deben ser observados con cautela. No obstante, constituyen un reconocimiento de alcance mundial, que en el caso de la geografía cultivada en la FAU, permite apreciar las áreas en que hay que perseverar y en las que hay que emprender iniciativas para consolidar el sitial de prestigio que la ubica nuevamente en el tercer lugar de la totalidad de las universidades hispano-luso parlantes, incluyendo por ello a España, Portugal, Brasil y toda América Latina.
En efecto, la ciencia practicada en el Departamento de Geografía de la FAU se ubica a continuación de la realizada en las dos universidades más grandes de América Latina: la Universidad Nacional Autónoma de México es la primera y la Universidad de Sao Paulo, la segunda, ocupando ambas los lugares 32 y 38 a escala mundial. La Universidad de Chile se ubica en el lugar 42, inmediatamente bajo la Universidad de Paris Panthéon-La Sorbonne y por sobre instituciones tan reconocidas como las universidades de Kyoto en Japón y Tsinghua de China (posición 43), la de Copenhagen (45), Newcastle (46), Pontificia Universidad Católica de Chile (47), Estocolmo (48), Sheffield (49) y la Ohio State University en el lugar 50. Más debajo de esta última posición, las disciplinas practicadas por las universidades son agrupadas en tramos. En el tramo 51-100 se encuentra la geografía de la Universidad de Buenos Aires, mientras que en el de 101-150 lo hacen las universidades Nacional y de Los Andes de Colombia y las de Campina y Federal de Río de Janeiro, ambas de Brasil.
Las fuentes de información que sustentan el Ranking QS se dividen en indicadores destinados a conocer la reputación institucional internacional y nacional de la disciplina practicada por las universidades y en el impacto de las investigaciones científicas que se practican en el interior de las unidades, medido a través de los artículos, capítulos de libros y “proceedings” de eventos registrados en la base de datos de Scopus, así como en un índice de citaciones que se refiere al reconocimiento que reciben los autores de los escritos por parte de sus iguales, que los utilizan como fuentes validadas del progreso del conocimiento disciplinar.
La versión 2022 del Ranking QS consultó 130.000 académicos que identificaron 10 instituciones nacionales y 30 internacionales que consideraron excelentes en el campo de la investigación científica disciplinar, mientras que la reputación internacional se basó en 75.000 respuestas donde se clasificaron las mejores 10 instituciones nacionales y 30 internacionales que son consideradas como las que mejor forman a los profesionales que reclutan los empresas públicas y privadas.
La productividad de la investigación científica emplea el llamado índice H que cuantifica el impacto de las publicaciones realizadas por los académicos, expresado en el número de sus contribuciones y, tal como se ha dicho, en el reconocimiento de los pares, cuantificado a partir de Elsevier Scopus, que es indudablemente la principal base de datos de alcance universal. A contar de 2022 se ha incorporado un nuevo indicador, correspondiente a la participación de las universidades en la Red Internacional de Investigaciones, que en esta versión solo se ha aplicado a las primeras instituciones del mundo, pero que se espera que cubra a la totalidad en las versiones próximas. Se trata de conocer la influencia geográfica de las unidades académicas, a partir de su vinculación a redes que demuestren la habilidad institucional para relacionarse internacionalmente y en forma sustentable y creciente con sus congéneres universales, garantizando la diversidad de sus contribuciones.
La destacada posición ocupada por la Geografía de la Universidad de Chile, tanto en este ranking como en sus similares, consolidada a través de los años, se ha conseguido especialmente debido a su elevada productividad científica. Entre 2011 y 2022, contabilizando sólo las contribuciones de sus profesores titulares y asociados, se han generado 187 proyectos de investigación que han contado con el apoyo financiero de fuentes nacionales e internacionales, lo que ha permitido publicar 327 artículos de revistas, capítulos de libros y otras formas de textos acreditados internacionalmente. En próximos análisis se incluirán los aportes de los académicos más jóvenes que se desempeñan como profesores asistentes y de aquellos que realizan o culminan sus doctorados en universidades del país y del extranjero, de forma tal que la totalidad de sus miembros dispondrán de los niveles más altos de formación como investigadores en el corto plazo. El Departamento de Geografía de la FAU debe ser considerado una fuerza de trabajo consagrada principalmente a la producción de conocimientos científicos originales, que le permiten colocar en las redes de que forman parte sus académicos, los saberes y prácticas mutltiescalares propios y específicos del país, facilitando su comparación con el resto del continente y del planeta.
Cuando se examinan los contenidos de los proyectos de investigación y los textos que difunden sus resultados a nivel internacional destacan asuntos de primera importancia para el país y de interés para las redes internacionales. Los problemas y conflictos socio-ambientales de escala territorial regional y urbanos, así como los riesgos socionaturales ocupan las primeras prioridades. Dentro de los primeros destacan las visiones profundas, analíticas y críticas de los procesos de extractivismo, especialmente en lo que dice relación a las actividades mineras, forestales, agrícolas y pesqueras que se realizan a lo largo del país. De igual manera, destacan los aportes en los campos de la regionalización, descentralización, gobernanza y territorialización, a la luz de los procesos ejecutados recientemente en el norte, centro y sur de Chile. A escala urbana, la ecología política, la segregación socio-espacial y socio-ambiental y los procesos de gentrificación han sido principales objetos de estudio en las ciudades, que atraen la atención internacional dado que se trata de aplicaciones sistemáticas de larga data de modelos socio-económicos que requieren ser evaluados y transformados.
En los riesgos socio-naturales, los esfuerzos han estado puestos en la comprensión de los cambios y variabilidades climáticas a escalas regionales y urbanas, y sus implicancias en la calidad ambiental y de vida, así como en la salud de las sociedades y los ecosistemas. Los socio-climas urbanos y su relación con los planes y diseños de las ciudades se han visto favorecidos con la utilización de modernos sistemas de capturas de datos mediante drones y satélites y la proliferación de los enfoques geomáticos y de los sistemas de información geográfica. Procesos de deglaciación, crisis hídrica, erosión acentuada de costas y montañas, pérdidas de biodiversidad y la vulnerabilidad social ante amenazas naturales han concentrado los conocimientos en tópicos en los cuales igualmente Chile es observado con interés por los investigadores del mundo.
El Ranking QS y la elaboración de los planes de desarrollo del departamento de Geografía y de la FAU constituyen oportunidades para evaluar el desempeño de la unidad académica y consolidar sus posiciones de prestigio y reconocimiento internacional como una de las mejores del país y del mundo hispano-luso parlante. Muy lejanos están en el tiempo el arribo forzado de esta unidad a la Facultad, así como la extrañeza con que se apreciaban el énfasis en la investigación y las publicaciones científicas, la existencia de doctores, los viajes al extranjero y la pertenencia temprana a redes internacionales. Es una obligación institucional asegurar la permanencia de la geografía de la Universidad de Chile entre las mejores del mundo y es tiempo de agradecer a todos los que lo han hecho posible, tanto con sus apoyos como con las críticas a nuestra presencia y actividad, lo que nos ha obligado siempre a superarnos. Llevamos 37 años en la FAU y deseamos dedicar este logro a nuestra casa de acogida y a sus habitantes. Creemos que es lo mejor que podemos ofrecer. Creemos también haber contribuido con nuestro quehacer a la diversidad, complejidad y multiescalaridad de las disciplinas que se practican en su interior, así como a su situación como un centro de investigación científica de relevancia internacional. Ojalá podamos mantenernos o aún superar esta posición. Contamos con todos para conseguirlo.
