El académico del Instituto de Historia de la Arquitectura de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Chile ante el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN), Felipe Gallardo Gastelo, analizó el acuerdo que alcanzó el organismo respecto del retiro temporal del monumento al General Baquedano ubicado en el sector de Plaza Italia.
En conversación con Radioanálisis de la Universidad de Chile, el arquitecto señaló que la decisión fue “difícil de tomar”. Sin embargo, sostuvo que lo que zanjó las posturas fueron los hechos registrados el 5 y 8 de marzo, vale decir, la quema de la estatua y el intento de retirar la obra de su pedestal.
“Para el Día Internacional de la Mujer, según lo explicado por el Consejo, cuatro desconocidos de overol blanco, dos de los cuales se subieron a la escultura aplicando cierra circular, cortaron por un lado casi completamente dos de las patas del caballo. Por el lado norte, ya tenían instalado una especie de cuerda por donde tirar la escultura”, dijo.
“Entonces, el nivel de violencia empezó a ser sobre la escultura casi profesional, si se puede hablar de vandalismo profesional. Eso pone en riesgo al monumento, porque cuando una escultura se cae, se abolla, se rompe. Eso si que es tremendamente difícil de restaurar”, comentó el arquitecto.
Al mismo tiempo, el arquitecto reconoció que la figura de Baquedano es compleja de analizar y que la sociedad bien puede reeditar su historia: “Los monumentos son nuestra cara envejecida como sociedad (…). En Chile tenemos esta fuerte tendencia a esta cosa camaleónica, reinventar el valor de la novedad y creo que eso no le hace bien a la identidad nacional”.
“Tenemos que aprender a convivir con nuestras cicatrices (…). Bienvenidas las nuevas conmemoraciones, bienvenidas los nuevos actores sociales, los reconocimientos y arrepentimientos”, añadió el experto.
Según el acuerdo alcanzado por el Consejo de Monumentos Nacionales el retiro de la escultura es una medida preventiva y temporal. En esa línea, afirmaron que iniciarán un proceso de restauración de la pieza. Del mismo modo, el organismo decidió realizar “acciones de resguardo de la tumba del soldado desconocido” y efectuar “obras de protección y refuerzo al pedestal o base de piedra del monumento”. Finalmente, el organismo solicitó “mayor resguardo policial para poder asegurar la integridad” de la obra patrimonial.
Por otra parte, en conversación para otro medio nacional y en el marco de diversas ideas que han surgido para reemplazar o resguardar la estatua, el académico del Instituto de Historia y Patrimonio, Felipe Gallardo señaló que "recordaría que la arquitectura y el patrimonio son expresiones de una sociedad. No podemos pretender solucionar los síntomas de los proceso sociales con arquitectura y diseño, menos las causas de ello. El vandalismo, el rayado, entre otras, tienen su raíz en otros lugares, distintos a los de la arquitectura".
Y agregó que "hay una doble dimensión en la escultura de Baquedano, y en otras... Por un lado el valor estético y artístico de la obra. Por otro, su carga simbólica significante para la sociedad. Es en pos de la primera que se remueve de Plaza Italia. Que los políticos y otros actores superpongan otras lecturas es natural y esperable. Es en pos de la primera que el Consejo de Monumentos Nacionales decide mudar la escultura de la Plaza para su restauración".