La Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas lanzó recientemente las Guías de Diseño Arquitectónico mapuche y aymara para edificios y espacios públicos. Estas obras fueron elaboradas por un equipo que integran el docente de la FAU Rodrigo Aguilar y los arquitectos Fernando Jiménez y Raúl Arancibia. Las guías tienen como propósito contribuir al respeto de los valores propios de los pueblos originarios mediante el reconocimiento de los elementos significantes que sean relevantes para la construcción de edificación pública con pertinencia cultural.
Su objetivo principal está enfocado a informar el proceso de formulación y diseño arquitectónico, entregando el soporte conceptual y práctico para el desarrollo de proyectos que reconozcan, respeten e incorporen las consideraciones culturales propias de la cosmovisión de los pueblos mapuche y aymara. El trabajo busca dar respuesta a las diversas interrogantes que demanda la gestión y el diseño de una edificación pública culturalmente pertinente, en una sociedad que se reconoce como múltiple y diversa.
La base conceptual para esta reflexión se encuentra en la exigencia que hoy se hace a la arquitectura de generar espacios y lugares apropiados al desarrollo de comunidades que poseen acervos culturales y patrimoniales distintivos, y que además se encuentran insertas en territorios dotados de características específicas.
Desde esta perspectiva, las guías consideran el estudio de los acervos culturales mapuche y aymara; el análisis y documentación de casos de arquitectura contemporánea y/o vernacular con pertinencia cultural; y finalmente las orientaciones para el diseño apropiado al lugar en el cual se insertan y a los valores culturales de las comunidades a las que sirven.
Las guías se estructuran en tres capítulos: el primero está enfocado en proporcionar los antecedentes culturales más relevantes de los pueblos mapuche y aymara que perviven hasta el día de hoy en el modo de habitar el territorio. Se intenta un acercamiento entre el lector y el acervo etnográfico, haciendo un recorrido por los rasgos distintivos de las culturas, sus patrones de asentamiento y los espacios paradigmáticos que han albergado sus creencias y valores, a la vez que incursiona en los cambios históricos que producen nuevas interacciones comunitarias e interculturales.
En el segundo capítulo se revisan analíticamente una serie de casos de estudio de arquitectura contemporánea, para el caso mapuche; y de asentamientos en las regiones Arica y Parinacota y Tarapacá, para el caso aymara, con el objeto de indagar en las evidencias y rasgos arquitectónicos subyacentes en ellos, identificando patrones simbólicos, culturales, formales y materiales posibles de transformarse en bases de diseño.
Finalmente, el capítulo dedicado a orientaciones de diseño se inicia con una serie de consideraciones, premisas y principios que sirven de base a las recomendaciones para el diseño arquitectónico de edificaciones públicas en territorios con presencia mapuche y aymara. Tales recomendaciones refieren, por un lado, al proceso de diseño de edificaciones públicas que son necesarias en contextos interculturales de ciudades de nuestro país; y por otro, al diseño arquitectónico propiamente tal. Ambos procesos sensibles a la cosmovisión, valores, creencias y necesidades sociales de los pueblos. En el primer caso se incluye un cuerpo de orientaciones técnicas que deben asumir los gestores de edificaciones públicas urbanas con pertinencia cultural. En el segundo caso, además de las reflexiones finales, se presenta un conjunto de recomendaciones necesarias de considerar en el diseño arquitectónico, agrupadas en torno a tres ámbitos: territorio, materialidad y sistemas constructivos.
Como apéndices, y con el afán de contribuir a una gestión intercultural en el desarrollo los proyectos y diseños de arquitectura, las guías proporcionan un glosario de términos en lengua mapudungún y aymara, que se une al esfuerzo por sintetizar en dichas lenguas las introducciones de los capítulos centrales; y un apéndice normativo, en el cual se sistematizan los principales cuerpos legales nacionales e internacionales suscritos por el Estado chileno, que apuntan a estipular los derechos de los pueblos indígenas.